Mi razón: Tú.

Tú. Mi razón para sonreír, seguir adelante, querer superar todo y ser feliz, pero contigo. Mi razón para seguir luchando. Eso eres tú, Raúl. Mi razón para querer sonreír, para creer en ese siempre que siempre estuvo alejado de mi conciencia. Tú, mi razón para ignorar mis pensamientos malos, y centrarme en lo único que vale la pena: tú. Mi razón para tener miedo de algunos de mis pensamientos, mi razón para temer a lo que pueda ocurrir en mi mente. Tú, mi razón para querer que queda mañana seas tú él que esté a mi lado y no otro. Tú, él único capaz de demostrarme cada vez que estamos juntos, que quiero estar contigo, y pasar el resto de mis días a tu lado. Tú, el que consigue hacerme olvidar todo y centrarme en lo único importante: tú y yo. Tú, Raúl Sánchez Angosto. Te amo, mi amor, no me dejes nunca. Tú: mi razón para seguir viviendo.