martes, 29 de noviembre de 2011

Quiero ser feliz.

Quiero ser feliz, y quiero que sea contigo. 


Te quiero Ñeñe♥

Tú♥.

Porque eres tú a quien quiero. Porque eres tú la persona con la quiero estar mucho mucho mucho tiempo, por no decir siempre. Por que quiero encontrarme con tu rostro dormidito y descansado cada despertar. Porque quiero que sea tu sonrisa la que alegre mis días tristes. Porque quiero que sea tu calor , el que borre el frío en mis noches de invierno. Porque quiero que seas tú quien este conmigo en los peores momentos y me anime. Porque quiero que sea tu voz la que me susurre palabras de amor cada noche entre mis sábanas. Porque yo solo te quiero a ti, y a nadie más. Porque te quiero a ti , mi pequeñín. Porque quiero que seas tú quien me enseñe a caminar por la vida. Porque quiero que sea a ti, a quien regale mi don más preciado. Porque eres tú, Raúl, a quien yo quiero. No me importa todas las tonterías que por mi mente puedan pasar, me da igual todo lo que tenga que soportar, si sé que por lo menos una vez al día contigo voy a estar. Si, sé que tú estarás siempre para alegrarme. Si sé que tú estarás para darme tu amor en cada momento. Si sé que estarás tú para espantar mis miedos. Te quiero, por todos esos segundos juntos tú y yo, por toda esa historia que estamos escribiendo los dos, por todo lo que nos queda por vivir, y por cada minuto que la vida me regala junto a ti. Te quiero, a pesar de todo lo malo que pueda ocurrir, a pesar de todas las veces que nos podamos pelear, y todas esas cosas que suelen ocurrir. Sé que seremos fuertes, sé que tú cogerás mi mano y estarás junto a mí. Eres mi razón para despertar cada mañana, para sonreír, e incluso para querer existir. Me haces querer cosas que yo nunca antes había pensado que podía querer con una persona. No pienso dejarte escapar, ni que te marches, ni que otra venga a por ti y te lleve consigo. Cuando estoy contigo soy fuerte, me siento protegida y sé que tú estarás para levantarme si caigo. Quiero dártelo todo y mucho más. Quiero darte todo el amor que se le puede dar  a una persona. Quiero darte calor cuando tengas frío, quiero darte besos cuando los necesites, abrazos cuando te sientas débil y mi voz para cuando tú te encuentres afónico. Te quiero mi vida, mi amor, mi Perritu. Te quiero mucho, cuando estoy contigo se me acelera el corazón, mi sonrisa se curva sola, y me pierdo en la perfección que tu cuerpo es para mí. Lloro cuando siento que te pierdo y que no puedo cuidarte, me lastimo sola de los miedos interiores que tengo relacionados con perderte. Me siento mal cuando no estás, porque me faltas tú. Te echo de menos en mi cama, cuando siento el frío envolver mi cuerpo. Te quiero Mi Pequeñín, te quiero mucho, y te puedo asegurar que ser feliz contigo es lo único que quiero.



martes, 15 de noviembre de 2011

#Una Nota.

Te quiero. ¿Por qué?, por que lo sé, porque lo he sentido y sé que volveré a sentirlo con esa intensidad de nuevo quizás cuando estemos Tú y Yo solos o cuando haya alguien más presente, a tanto no llego. Quizás no te vaya a querer todos los días del mismo modo. Otros incluso querré colgarte un pino, pero eso no quitara que quiera seguir contigo hasta cuando termine el mundo. No puedo prometerte que nunca vuelva a dudar o me deje de emparanoiar para siempre, pues una persona como yo lo hace bastante. Tampoco puedo asegurarte que mi amor sea para siempre. Puedo decirte que en todos mis planes de futuro tu nombre está escrito, que tu sonrisa es el mejor regalo que me puedes dar de forma inconsciente y tu risa la mejor melodía para un día nublado. Puedo asegurarte que ahora mismo lo que más me importa eres tú, que tu felicidad sobrepasa a la mía, que quiero estar contigo y nadie más. Que contigo quiero cosas que nunca antes quise con nadie, que cada momento a tu lado es único y que eres el dueño de mis sonrisas tontas. Nunca antes pensé que se podía ser más ñoña y tierna, pero tú me descubriste que sí. Que antes nunca había creído que pensaría que una persona es la más hermosa del mundo, tú me hiciste cambiar. Que eres todo lo que siempre quise y que ante todo nunca te dejaré marchar. Así que mis últimas palabras son: pase lo que pase, no te marches nunca mi amor.


viernes, 11 de noviembre de 2011

La Pequeña Alicia. Relato 2.

La Pequeña Alicia se despierta. Se siente bien, por lo menos de momento. Se queda pensativa, apoyada en el tronco del árbol y con un hilo musical en la cabeza. Se pasa los dedos por el cabello, los enrosca y juega con ellos. Ella se aleja del árbol y vuelve a  emprender su camino, si, está sonriendo, pero dolorosas sensaciones siguen dañándole por dentro.


La gente le pregunta: "¿Qué tal Pequeña Alicia?". Ella contesta con una falsa sonrisa: "Bien, como siempre". Pero en realidad ella se muere por dentro. Se siente perdida. Se vuelve a alejar de las personas y se resguarda en su mundo, su música y su cama. La Pequeña Alicia corre por la calle, todo el mundo la observa, ¿esperarán algo de ella?. Ella tiene miedo, se siente sola, fuera de lugar, como si ese no fuera su mundo...porque nadie la entiende, pero....lo peor, es que ni siquiera ella se entiende.


-¿Por qué te complicas tanto Pequeña?. se pregunta así misma, mientras da una patadita a una piedra del camino. -Yo solo quiero ser feliz a su lado y estar a su lado cada segundo del día, ¿Por qué?, por que le quiero, sino no querría todo eso- habla consigo mismo, cuando de repente, en su mente, resuena esa odiosa pregunta "¿De verdad quieres eso?". Su lado malvado la está atacando. Ella vuelve a sentir esa sensación y se contesta así misma un poco indecisa : - Si, es lo que quiero.-


"Los demás observan a la Pequeña Alicia como si estuviera loca. Está ausente, se la ve extraña, come poco, le cuesta sonreír, incluso reír. Quieren ayudarla, pero...ya no saben que decirle. Es un nuevo problema, una nueva broma macabra del destino."


La Pequeña Alicia, mira a todos lados, sabe que todo se le pasará. Todo saldrá bien, todo irá fenomenal. Ha superado demasiadas cosas ya, es fuerte, aunque a veces lo dude. Se pone sus cascos y escucha " Stand Up and Fight" de Turisas, y se siente fuerte, bastante fuerte. Se pelea consigo misma, intentando entenderse, porque ella sabe que le quiere, que quiere ser feliz a su lado y despertar cada amanecer con el cuerpo de él enredado en la misma sábana que la suya. Eso es lo que quiere, solamente eso y sentirse bien.


La Pequeña Alicia, se acerca a su cama, exhausta de tanto jaleo mental y se deja caer. Cierra los ojos pensando que cuando despierte todo será igual que antes, será feliz, sabiendo lo que quiero y sintiendo el amor que sabe. Suspira unas últimas palabras antes de dormise: "Todo irá bien..."

La Pequeña Alicia. Relato 1.

Y aquí se encuentra en medio del camino, no duda porque sabe lo que quiere, pero se siente extraña y con raras sensaciones. ¿Qué le ocurre?, nadie lo sabe. Se lo está guardando todo para ella misma, sabe que le quiere; la Pequeña Alicia lo sabe; sabe que quiere estar con él y ser feliz a su lado. La Pequeña lo sabe, pero...esas extrañas sensaciones en el pecho de ella la están mareando. ¿Qué le sucede a la Pequeña?


Corre hacia adelante, alguien grita su nombre. Se gira bruscamente, es su pensamiento. Al principio vacila unos instantes y sigue corriendo, le mintieron cuando le dijeron que el amor sería fácil. La Pequeña empieza a llorar, vuelve a sentirse débil, cae de rodillas y después de intentar levantarse, se rinde y se queda en su lugar.


-¿Qué te pasa, Pequeña Alicia?- le susurra una voz a lo lejos. Ella observa a su alrededor, tiene miedo, tiembla. No sabe que contestar, así que muda se tapa los oídos para no escuchar.


-Pequeña Alicia...- la voz insiste, ella empieza a frustrarse, quiere que se marche ese susurro continuo.


-Déjame en paz...márchate- murmura entre sollozos y tartamudeos.


-Ay, Pequeña Alicia, ríndete, no conseguirás escapar- ella escucha sus palabras. No puede permitirlo, su mente sabe lo que quiere.


-No!, no me rendiré, volveré a sentirme bien!- la Pequeña Alicia se levanta, tropieza, pero se mantiene en pie. Anda con paso decidido, pero la molesta sensación sigue en su pecho, sabe que no es su corazón, es un algo molesto.


No sabe porque pero vuelve a correr, necesita sentirse bien. Necesita descansar. La Pequeña Alicia solo quier despertar de esa mala pesadilla que no parece nunca acabar. Little Alice solo quiere descansar sobre el pecho de su príncipe y no volver a sentirse mal.


Otra vez esa mala sensación en su pecho. La Pequeña Alicia vuelve a parar, se gira bruscamente buscando algo en la oscuridad. Es esa voz malvada...que vuelve a actuar.


-Alice!...Pequeña Alicia, jaja. ¿Qué te ocurre?, ¿vuelves a fallar?- la voz susurrante empieza a reirse, ella se siente más pequeña. Una opresión en su pecho le molesta, tiene mal en su interior.


-Lárgate!- le grita llevándose la mano al pecho y otra a la cabeza. Sabe lo que quiere, pero esa mala sensación le hace pensar de más. Ella respira, retoma su camina hacia ningún lugar. Le necesita a su lado, sabe que sin él su vida no sería igual.


Han pasado unos minutos, la Pequeña Alicia sigue andando sin parar, de repente, se tropieza, se cae y se vuelve a levantar una vez más. Sabe que no quiere rendirse y sabe que si su corazón no le quisiera, no lo pensaría. Pero...esa sensación sigue dañándole por dentro, la pobre y pequeña Alicia se apoya sobre un árbol y se deja caer, rozando con su espalda la dura corteza del tronco. Necesita volver a dormir, descansar, no sentir y no pensar. La Pequeña Alicia no se rinde...pero le cuesta continuar.























sábado, 5 de noviembre de 2011

...

@FrasesRealidad


#Si una persona realmente quiere verte, hace todo lo posible para llegar a ti, sin miedos, sin excusas.

"Abrázame"



Abrázame y no me digas nada sólo abrázame 
Me basta tu mirada para comprender que tú te irás... 
Abrázame como si fuera ahora la primera vez 
como si me quisieras hoy igual que ayer... abrázame... 
Si tú te vas te olvidarás que un día hace tiempo ya 
cuando éramos aún niños me empezaste a amar 
y yo te di mi vida, si te vas... 
Si tú te vas ya nada será nuestro tú te llevarás 
en un sólo momento una eternidad 
me quedaré sin nada si te vas... 
Abrázame 
y no me digas nada sólo 
abrázame 
no quiero que te vayas pero se muy bien que tú te irás 
Abrázame como si fuera ahora la primera vez 
como si me quisieras hoy igual que ayer... 
abrázame... 
Si tú te vas me quedará el silencio para conversar 
La sombra de tu cuerpo y la soledad 
serán mis compañeras si te vas... 
si tú te vas se irá contigo el tiempo y mi mejor edad te seguiré 
queriendo cada día más 
esperaré a que vuelvas si te vas...



viernes, 4 de noviembre de 2011

No te rindas. No, esta es nuestra lucha.

¿Qué ocurre?, ¿Por qué?, ¿Ya piensas abandonar la batalla?. No lo hagas, lucha por lo que deseas, pelea por lo que más ames pero nunca te rindas ante la primera duda que se interponga por tu camino. Imitame, batallé tres semanas, y lo sigo haciendo solo para que este capítulo no cese antes de no convertirse en una historia.

No quiero perderte, quiero que nos hagamos felices mutuamente. Admito que yo también me cansé, decaí, pero me levanté y continué luchando. No dejes que lo que sea que está en tu mente mate a lo que está en tu corazón, porque entonces habrás perdido. Puede que haya momentos en los que no entiendas a tus pensamientos, en los que llores por dolor o incluso algunos en los que la salida y la rendición sean tu mejor baza, pero no lo hagas. No puedes acabar con esta lucha, nuestra lucha. La lucha por ser algo, por sentir el amor, ser felices. Solo tú y yo, es nuestra dulce blasfemia. Tú asalta-asilos y yo asalta-cunas.

Recuerda conmigo esos primeros días de sonrisas tontas y nervios en el estómago. Ese primer beso, o cuando roce por primera vez tu piel debajo de tu camiseta. Recuerda como superamos juntos estos altibajos, esos sueños de futuro. Recuerda el otro día cuando dormimos juntos, y aunque tú no le sepas intenté decírtelo al oído. Cobarde de mí. Recuerda como solo hace dos días, pensábamos en el sábado. Recuerda, como combatimos contra todo.

No quiero ir de persona fuerte, porque poco a poco lo iré siendo, aún no lo soy. Pero mírame, lo superé, ahora estoy perdida, confundida y me siento insignificante, pero sé no quiero rendirme, sé que esto son pruebas del destino, o bromas macabras como dice Sabina, pero sea lo que sea, no te rindas. Sácale al suelo el dedo, levántate con ayuda de mi mano y bésame, quizás nunca seamos como el resto de personas, quizás discutamos a menudo, pero hay algo en mí, que cuando estoy contigo se siente perfectamente, además, quizás no tenga muchas cosas claras, pero ahora mismo sé, que estoy dispuesta a luchar hasta el final y a no poner un punto final a eso que somos tú y yo.



jueves, 3 de noviembre de 2011

NADA.


Frases.

@ Ernesto 

#1-Antes, tenía miedo de enamorarme. Ahora, tengo miedo de perderte .

#2-Lo que hoy siente tu corazón, Mañana lo entenderá tu cabeza .

#3-Se puede engañar a la mente, Pero no puedo mentirle a mi corazón.